Tras varios meses de investigación y no recibir respuestas favorables del GAD Otavalo realizan la acusación pública


(Redacción Otavalo).- El reclamo público fue realizado por el grupo empresarial Azoth, quienes dan a conocer ciertas irregularidades en el Registro de la Propiedad de Otavalo, donde se existirían aparentemente altos valores en los cobros por los servicios efectuados.
Edwin Vaca y Fernando Haro principales funcionarios de la empresa denunciante, informaron que toda la problemática inició por la Reforma a la Actualización de la Ordenanza del Registro de la Propiedad, ejecutada por el concejo municipal del GAD Otavalo que no habría cumplido con las normativas que exige la ley y está vigente desde el año 2020.
Todo inició por trámites personales de los antes mencionados, donde palparon las anomalías en los valores de las tazas, por lo cual desde el mes de octubre del año 2020 empezaron a recabar información.
Tras varias reuniones con profesionales de la materia, se procedió a solicitar la cooperación de un equipo técnico con el GAD Municipal. Para llevar a cabo el análisis técnico financiero, análisis social y socialización a la ciudadanía por los nuevos valores. Sin tener una respuesta favorable por parte de las autoridades.
Edwin Vaca aduce que Otavalo es el cantón más costoso de Imbabura y gran parte del país con respecto a las tazas del Registro de la Propiedad. A su vez de los que menos servicios prestan y donde menor cantidad de tiempo se localiza al Registrador en su oficina para solventar los diferentes casos.
Por ejemplo en el trámite de una Posesión Efectiva se debe cancelar el 10% de un salario básico unificado que representa USD 40, mientras que en los cantones aledaños como Cotacachi 6 dólares, Ibarra 4 dólares, Pimampiro 6 dólares, etc.
Fernando Haro citó que en la propia ordenanza del Registro de la Propiedad, en la parte de los considerandos, manifiesta que el artículo 33 inciso 2 de la Ley de Sistema Nacional de Registro de Datos Públicos al tratar del Régimen Económico y Financiero, indica que “En el caso del Registro de la Propiedad de inmuebles, será el Municipio de cada cantón que con base al respectivo estudio técnico y financiero establezca anualmente la tabla de aranceles por servicios de registro y certificación que presten”.
Desde el 3 de septiembre del 2020, este grupo de jóvenes profesionales otavaleños solicitaron el estudio técnico financiero. La respuesta se dio el 23 de octubre, casi al mes de cumplirse el silencio administrativo de acuerdo al artículo 207 del Código Orgánico Administrativo (COA) y expresa lo siguiente “Una vez realizada la búsqueda en los archivos de la municipalidad no sé a encontrado la documentación requerida”
Como segundo paso, el 18 de enero del presente años se solicitó las copias certificadas de:
– Actas de la comisión de concejales en la cual se analizó y discutió la ordenanza sustitutiva a la ordenanza para la organización, administración y funcionamiento del registro de la Propiedad del cantón Otavalo.
– Actas de la cesión de Concejo Municipal N.° 37 con fecha 9 de diciembre del 2019 y de la cesión N.° 38 con fecha 12 de diciembre del 2019.
– Informe Jurídico que sirvió de sustento al Concejo Municipal para llevar adelante la discusión de la presente ordenanza.
El Municipio de Otavalo cumplió con los dos primeros requerimientos, con la lista detallada se puede evidenciar que no existe orden del día en las convocatorias donde se hayan dado tratamiento al proyecto, es decir que nunca existió una acta de los concejales.
Con respecto al informe jurídico únicamente les proporcionan dos hojas, la primera con artículos de la Constitución y Cotad, más el pronunciamiento de la procuraduría sindica donde no se específica con detalles lo requerido.
Por último se solicitó el pasado 27 de mayo el acta de la aprobación del incremento de valores, con los estudios de socialización hacia la ciudadanía por parte de participación ciudadana establecido en el COTAD, el 2 de junio nuevamente responden que no sé encontró la información en los archivos.
Aún no existe un pronunciamiento oficial por parte del alcalde Mario Conejo o algún vocero oficial del cantón Otavalo.